Me siento de maravilla, aunque todo parece indicar que seré de esas embarazadas que sufren de dolor del ligamento redondo pero no me importa, cualquier molestia o incomodidad vale la pena si es porque nuestr@ bebé está creciendo.
Las náuseas han disminuido muchísimo y eso hace que coma un poco mejor, aún no estoy convencida de comer carne todos los días pero estoy haciendo un pequeño esfuerzo. La Dra. BG me mandó a hacer análisis para ver si estaba anémica y por lo pronto, no estoy para nada anémica!!! Así que anoté una pequeña victoria al vegetarianismo y a la obtención de hierro de leguminosas :)
Ya comienzo a sentirme embarazada aunque la Dra. diga que mi ropa me seguirá quedando hasta la semana 20, no lo creo. Además la semana 20 es muy poco tiempo para disfrutar de la unifila en las tiendas, ya saben, esas para mujeres embarazadas y personas de la 3ra edad jajaja y también es poco tiempo para estacionarme en los lugares de "futuras mamis" porque sí que sería extraño que me estacionara ahí con mi pancita plana jejeje.
Lo que he estado pensando es que sí habrá una ventaja a mi no panza: no andarán los de la oficina agarrándome la pancita a modo de saludo. Agh! No me quiero sentir como perrito que saludan a palmadas, tampoco quiero que mi panza sea propiedad de la comunidad y la agarren sin ton ni son.
Es extraño pero desde ahora ya siento cierta actitud defensiva hacia mi panza, tengo como un instinto de protegerla y sí, me siento agusto acariciando el lugarcito donde está tan comodamente nuestr@ bebé. También Ro me la acaricia por las tardes y por las noches, qué ricura.
Las náuseas han disminuido muchísimo y eso hace que coma un poco mejor, aún no estoy convencida de comer carne todos los días pero estoy haciendo un pequeño esfuerzo. La Dra. BG me mandó a hacer análisis para ver si estaba anémica y por lo pronto, no estoy para nada anémica!!! Así que anoté una pequeña victoria al vegetarianismo y a la obtención de hierro de leguminosas :)
Ya comienzo a sentirme embarazada aunque la Dra. diga que mi ropa me seguirá quedando hasta la semana 20, no lo creo. Además la semana 20 es muy poco tiempo para disfrutar de la unifila en las tiendas, ya saben, esas para mujeres embarazadas y personas de la 3ra edad jajaja y también es poco tiempo para estacionarme en los lugares de "futuras mamis" porque sí que sería extraño que me estacionara ahí con mi pancita plana jejeje.
Lo que he estado pensando es que sí habrá una ventaja a mi no panza: no andarán los de la oficina agarrándome la pancita a modo de saludo. Agh! No me quiero sentir como perrito que saludan a palmadas, tampoco quiero que mi panza sea propiedad de la comunidad y la agarren sin ton ni son.
Es extraño pero desde ahora ya siento cierta actitud defensiva hacia mi panza, tengo como un instinto de protegerla y sí, me siento agusto acariciando el lugarcito donde está tan comodamente nuestr@ bebé. También Ro me la acaricia por las tardes y por las noches, qué ricura.
awwww.. cosiiii..
ResponderEliminarte leo y me emociona!!..
Les deseo que todo siga tan bieennn como hasta ahora :D.. Saludoosssssssssss
Pues mira, de momento mejor que no se te note, así como bien dices la gente no te sobará la panza a diestro y siniestro, siempre me he preguntado que quién les daba el derecho a hacer eso, yo les mandaba directamente a sobarse ellos sus narices jajaja... aunque claro, si es Ro la que te la acaricia supongo que todo es diferente, no es lo mismo que lo haga un cualquiera a que lo haga tu pareja, eso gusta ehhhhh Besitos chicas ;)
ResponderEliminarGracias Insidethecloset. Nosotras andamos claramente vueltas locas.
ResponderEliminarAy sí Solete, verás que en cuanto se me bote este pitufo aumentarán las entradas en la etiqueta de chismes de oficina.
en el primero se suele notar más tarde, además si no llevas tratamiento hormonal (otro eco-baby!) - yo estuve hasta la semana 20 con ropa normal. De hecho, un día antes de pasar a la 21 tenía la defensa de mi doctorado en una falda ajustada de mi ropa normal. No era lo más confortable, pero todavía funcionaba. Y el plus es obvio: nada de miradas raras, nada de manos no deseadas en tu tripa. Minus: nadie te deja asiento en el autobus...
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